En el tercer día tuvimos un par de visitas atípicas que las descubrimos gracias a la red y a los foros. Valoré tanto los consejos de otros viajeros, que este viaje en sí supuso un punto de inflexión en cuanto a mi forma de abordar los viajes, dando más importancia a la planificación previa.
La primera de las visitas fue el Berliner Unterwelten, una visita del Berlín subterráneo y su historia. Hay cuatro tours que tratan periodos y momentos históricos diferentes. En nuestro caso escogimos el primero que se llamaba 'Mundos en Tinieblas'. El cual estaba enfocado en el conflicto bélico de la Segunda Guerra Mundial, en los refugios antiaéreos destinados a la población civil así como la propaganda que había detrás. La visita la terminamos en un museo con hallazgos de la posguerra y de cómo en ausencia de cosas se las ingeniaban para reciclar los materiales bélicos, entonces inútiles.